Entre olas de pandemia: ¿qué aprendimos en las instituciones?

Abstract

Después de una primera ola trágica que sorprendió y desbordó a los centros de mayores, el mayor conocimiento del virus, la “medicalización adecuada” de los centros y “las medidas de salud pública razonables” en plena segunda ola hubiera podido reducir la mortalidad ocasionada por el virus, el aislamiento y la soledad. La adopción de medidas asistenciales y de cuidados más allá de las recomendaciones epidemiológicas y de salud pública después de la primera ola ha comportado que la incidencia de casos Covid fuera menor i la mortalidad global no se modificara. Método: Analizar la mortalidad producida en un centro sociosanitario de 123 camas en 2019 y 2020 e impacto global de Covid (casos de Covid 19 y mortalidad en cada brote). Resultados: En 2019 hubieron 766 ingresos, 213 exitus y una mortalidad de 27.8%. En 2020 ingresaron 715 personas, 183 fueron exitus y la mortalidad fue del 25.6%. En relación a los brotes de Covid-19, se registraron 28 casos en marzo con 6 exitus, 14 casos en junio con 5 exitus y 8 en noviembre sin ningún exitus. Conclusiones: La adopción de medidas multidimensionales por todo el equipo interdisciplinar ha permitido superar la crisis de manera menos traumática a través de cribajes periódicos a usuarios y profesionales. La mortalidad global en el centro no se ha incrementado con la pandemia