Canvi climàtic i seguretat alimentària microbiològica

Abstract

Aquest informe, aprovat pel Comitè Científic Assessor de Seguretat Alimentària el març del 2025, aborda la influència del canvi climàtic en la seguretat alimentària microbiològica. Explica com els canvis en els patrons meteorològics afavoreixen la proliferació de perills biològics (bacteris, virus, fongs i paràsits) al llarg de tota la cadena alimentària, cosa que espera que augmenti les malalties d'origen alimentari. El document destaca la importància de factors ambientals clau com la temperatura i les precipitacions en la presència de patògens i la necessitat d'adoptar un enfocament “Una Salut” per abordar aquests riscos de manera integral. Finalment, subratlla la importància d'adaptar els sistemes de control, desenvolupar models de risc i millorar la recopilació de dades per fer front a aquest escenari canviant.

El cambio climático constituye un desafío transversal que afecta a todos los eslabones de la cadena alimentaria, desde la producción hasta la distribución y el consumo. El incremento de las temperaturas globales y la variabilidad de los patrones meteorológicos influyen directamente en la proliferación y distribución de peligros biológicos, lo que puede traducirse en un aumento de enfermedades de origen alimentario.

Factores como la temperatura, las precipitaciones, el pH, la salinidad y la intensidad de la luz ejercen una influencia crucial en la contaminación y la seguridad de los alimentos. Los cambios en estos parámetros pueden modificar tanto la presencia de patógenos como la calidad de los cultivos y productos alimentarios, afectando la disponibilidad de agua potable e incrementando el riesgo de contaminación en diferentes etapas del procesamiento.

Dado el complejo escenario que se plantea, resulta imprescindible adoptar medidas con un enfoque global que integren la salud humana y animal en el medio ambiente. Esto debe traducirse en la revisión y adaptación de los sistemas de control, en el desarrollo de marcos de modelización del riesgo y en la implementación de medidas preventivas adecuadas a la evolución detectada. La recogida sistemática de datos epidemiológicos, el desarrollo de nuevas tecnologías para el monitoreo y la detección de peligros, así como la colaboración entre autoridades, industria y comunidad científica serán claves para adaptarse a los nuevos escenarios que se deriven.

Climate change constitutes a crosscutting challenge affecting every stage of the food supply chain, from production to distribution and consumption. The increase in global temperatures and the variability of meteorological patterns directly influence the proliferation and distribution of biological hazards, which may lead to a rise in foodborne illnesses. Factors such as temperature, precipitation, pH, salinity, and light intensity play a crucial role in food contamination and safety. Changes in these parameters can affect both the presence of pathogens and the quality of crops and food products, thus bearing on the availability of drinking water and increasing the risk of contamination at various stages of processing. Given the complex climate change scenario, a global focus that integrates human and animal health with environmental changes is imperative. This approach should be manifest in the revision and adaptation of control systems, the development of risk modelling frameworks and the implementation of preventive measures based on the detected changes. The systematic collection of epidemiological data, the development of new technologies for hazard detection and monitoring, and enhanced collaboration between authorities, industry, and the scientific community will be key to adapting to the new scenarios arising from climate change.